Jacuzzi en el ático, terrazas con vistas extraordinarias, cercanía a senderos de senderismo y bicicleta en la naturaleza.

Las terrazas dan a la A7, el ruido del tráfico es molesto y sugiere falta de soluciones como pantallas acústicas en la carretera. Sin microondas ni minibar, la bañera de hidromasaje es incómoda y el espacio del sanitario carece de ventilación.

Las vistas desde la habitación eran impresionantes y proporcionaron un ambiente perfecto para desconectar.

Lamentablemente, mi estancia no fue tan placentera como esperaba. La habitación no contaba con microondas ni minibar, lo cual fue una decepción. Además, el servicio en el restaurante dejó mucho que desear, no había suficientes opciones disponibles y el cierre a temprana hora no ayudó. La falta de atención al cliente también se notó durante la cena, donde el servicio era lento y poco atento.

Las instalaciones son muy agradables, pero ruidosas.

agradable pero con detalles mejorables

Las instalaciones son modernas y bien cuidadas, especialmente el jacuzzi en el ático que ofrece una experiencia relajante. Las vistas a la montaña desde nuestra habitación eran impresionantes y proporcionaron un ambiente perfecto para desconectar. Los desayunos eran variados y de buena calidad, especialmente los productos locales que se ofrecían.

El ruido del tráfico proveniente de la carretera fue molesto en momentos de tranquilidad.

mi experiencia en la sitja fue, francamente, decepcionante. sin un minibar ni microondas, la estancia se sentía incompleta. el jacuzzi no era tan relajante y, para colmo, no recibí un upgrade que claramente merecía. casi escribo una buena crítica, pero eso sería demasiado generoso, ¿verdad? la atención dejaba mucho que desear, ni siquiera en la cena me atendieron bien.

La suite junior era amplia y contaba con una bañera de hidromasaje. Agradecí los detalles personalizados en la habitación para celebrar el cumpleaños de mi esposa, lo que hizo que nuestra estancia fuera muy especial.

Disfruté de mi estancia con amigos. Pasamos noches increíbles en la terraza, el ambiente fue relajante. Hicimos un detox de emociones y aromaterapia que nos dejó renovados. Además, aunque la cena fue buena, el servicio podría ser mejor.

La habitación era una Junior Suite y la cama súper cómoda, lo mejor. Teníamos vistas a la montaña desde la terraza, genial para relajarse. Aunque la atención no siempre fue la mejor y hubo momentos raros en la cena, la cama y el espacio valieron la pena. Aunque la sauna y jacuzzi en el ático también se ven muy bien. En general, una buena experiencia.

Una estancia inolvidable con un toque especial

Disfrutamos de la Junior Suite, amplia y cómoda. Las vistas eran increíbles. El jacuzzi en el ático fue un lujo después de un día de exploración. Recomendamos preguntar por las opciones de spa, ya que no estaban disponibles sin reserva previa. ¡Gran lugar para desconectar!

pero el ruido del tráfico fue un poco molesto. la comida estaba riquísima, especialmente el salmón! ! el hotel es muy acogedor y limpio. la habitación tiene unas vistas geniales y el jacuzzi fue una gran ventaja.

Disfruté de la Junior Suite, muy espaciosa con vistas a la montaña. Especialmente me gustó el servicio de jacuzzi en el ático, fue una experiencia genial. Los desayunos estaban muy bien, con productos locales frescos. La limpieza fue impecable. Una estancia muy agradable. 😊

el jacuzzi en el ático es perfecto y muy bien montado. la cena fue correcta, pero nos gustaría más opciones.

La Sitja, Adults Only tiene unas instalaciones muy bien cuidadas. La Junior Suite donde nos alojamos era acogedora y tranquila. Además, el jacuzzi en el ático fue una experiencia muy relajante. La localización es perfecta, justo al lado de una iglesita, y hay senderos de senderismo cercanos. El desayuno fue bastante bueno, ofreciendo productos frescos y locales.

Lo recomiendo.